En COOPERTEI implementamos un Programa de Identidad, Imagen y Comunicación Corporativa en su máxima expresión.
La identidad no sólo fue determinar quién era y quién sería COOPERTEI; también hizo falta que todos lo sepan.
Fue un programa de imagen porque detectamos, encausamos y controlamos la imagen que tenían de la empresa los actores sociales que la rodeaban.
Fue un programa de comunicación porque por medio de ésta optimizamos la concreción de los objetivos que COOPERTEI había planteado.
La primera parte del programa fue totalmente analítica. Con este proceso se debe determinar quiénes somos, qué atributos tenemos y qué queremos lograr. Esto involucró una serie de entrevistas y relevamiento visual (interno y externo) que nos dio el material (input) para definir los atributos de COOPERTEI.

La segunda parte fue la normativa. Aquí determinamos una política de imagen y comunicación que afianzaría o rectificaría la política de comunicación de ese momento.
Para ello diseñamos planes de comunicación particulares y los ajustamos meticulosamente a los objetivos.
La última parte del Programa fue la implementación de todos estos programas particulares.
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